13 de diciembre de 2014

Tristeza... o es alegría!

Todos nosotros en un momento determinado nos sentimos abatidos, tenemos la sensación de que todo nos sale mal, qué los que nos rodean no nos entienden. Sentimos ésa sensación en un día determinado y tal vez por un echo que en otro momento no te hubiere afectado en ése momento sientes el abandono total.
Los médicos lo achacan a la depresión, (si le cuentas esto) pero yo tengo otra teoría (claro que la mía no es científica ni nada parecido) diferente para este sentimiento de desesperanza. Creo que la tristeza de los  acontecimientos que te trae la vida, algunos días no los puedes digerir por que alguien te decepciona de tal manera que te cuesta días entender los engaños engañosos que nuestra mente representa una acción inesperada que cuesta entender un montón.
Yo, cómo la mayoría de personas de mi edad tenemos un médico especial que nos vigila nuestras necesidades neuronales que pudieren sobrevenir en cualquier momento. Mi médico es un chaval excepcional que se preocupa un motón incluso si escribo o no, si camino lo suficiente, si hago mis ejercicios. En fin, una persona responsable en  su profesión y, preocupado por sus pacientes, (a mí me gusta un montón que se preocupe por mi) pero si le digo lo que os estoy contando, seguro me atiborra de medicinas (eso si, no me gustan la medicinas, solo las imprescindibles y él lo sabe) para que este alegre y me valla con mis amigas un rato.
Se me ha ido la onda de lo que comencé a relatar al pensar en mi médico.
 La verdad es que nos preocupamos un montón sin necesidad alguna, nos enfadamos...para qué sirve! Siento que para darnos el placer de desahogar los nervios que la monotonía nos trae.
Todos necesitamos un incentivo para vivir o estamos apañados; nos centramos en nosotros sin pensar en otra cosa más, en lo desgraciadas que somos. No, no es así, todos tenemos la culpa de lo que nos sucede por que sentimos que tenemos esas prioridades que nos hacen desdichadas, pues bien, ¿si somos libres de elegir por qué te sientes así? esa pregunta me la hago de vez en cuándo, ésas veces cómo hoy que te sientes  diferente por un motivo determinado que pasa a todos nosotros. Pero... tu tienes el poder de hacer que no ocurra lo que está pasando y aún así pasas por ello.
Mira! cuándo tenemos él poder de decidir en nuestra  vida  no puedes quejarte, hay millones de personas que no tienen ese inmenso poder de decisión que tienes tú, por lo tanto, tampoco tienes derecho a estar triste ni hacer de la vida de los otros un,,,digamos infierno (aunque es una palabra muy fuerte que no me gusta) y, no tienes derecho a ello. Si tienes ése día malo pues....a coger un buen libro que se me quiten todas las tristezas repentinas y los malos humores que se entran en la cabeza como si todo tu entorno tuviera la culpa de tus tonterías, tonterías que para ti son cosas muy importantes y que si quieres resolverlas puedes, por lo tanto si puedes resolver una situación y no lo haces no culpes al otro, culpaté tu, es una situación de tu agrado, la situación que tu misma creas.